¿Cómo resolver una hipoglucemia de la forma más rápida y sin rebotes?

Artículo escrito por Glucoup.

Las personas con diabetes por lo general conocemos bien las sensaciones que producen las hipoglucemias. Y no son precisamente agradables. De hecho, pueden ser aterradoras. Es por ello por lo que debemos llevar siempre con nosotros hidratos de carbono de rápida absorción por si nos encontramos ante esta situación.

Pero estos hidratos de carbono no actúan todos de la misma manera en nuestro cuerpo ni con la misma rapidez. Durante años (o décadas) hemos acarreado azucarillos y zumos industriales para solventar estas bajadas de azúcar, pero que a posteriori producían un rebote en la glucemia que nos llevaba a una hiperglucemia y nos subían en esa “montaña rusa” de la que era difícil bajarse.

Afortunadamente, hoy en día existen alternativas mucho más eficaces frente a las hipoglucemias, cómodas de llevar encima, y sobre todo que no producen ese rebote después, ayudándonos a mantener una glucemia mucho más estable. Estamos hablando de la glucosa, que podemos encontrar en tabletas masticables o en formato líquido.

Curiosamente, en España no se han empezado a utilizar estos productos en el tratamiento de las hipoglucemias hasta hace relativamente poco. En cambio, tanto en el resto de Europa, como en Estados Unidos o Canadá, están a la orden del día, no sólo para personas con diabetes, sino también utilizadas por cualquier persona que requiera un impulso de energía en un momento determinado (deporte, exámenes, viajes…).

La glucosa es la principal energía tanto de nuestro cerebro como de nuestros músculos. Su índice glucémico es 100, lo que quiere decir que la absorción es muy rápida, pudiendo así remontar una hipoglucemia mucho más rápidamente que el azúcar (cuyo índice glucémico es de 70), y sin los rebotes que producen los zumos industriales o refrescos azucarados. A diferencia de la fructosa y la sacarosa (azúcar común), la glucosa no necesita disociarse antes de llegar al torrente sanguíneo, lo que hace que su efecto sea mucho más inmediato.

Es, por tanto, hoy en día, la mejor opción a la hora tanto de prevenir, como de tratar una hipoglucemia. Y digo prevenir, porque gracias a la tecnología con la que contamos actualmente, podemos ver la tendencia en nuestros sensores y adelantarnos a esa bajada, simplemente masticando unas tabletas de glucosa, y esquivando así la temida hipoglucemia.

En cambio, si no hemos podido adelantarnos y nos encontramos ya con valores bajos en nuestra glucemia, lo más indicado será ingerir glucosa (ya sea en tabletas o líquida) lo antes posible. La cantidad que se debe consumir en cada caso dependerá de las circunstancias de cada persona.

Podemos decir, por lo tanto, que en diabetes hemos avanzado no sólo en tecnología, sino que también hemos descubierto nuevas herramientas como la glucosa, que nos ayudan a que nuestro día a día sea más llevadero, con un mayor control y empoderamiento sobre nuestras glucemias.